Una Feria del Libro Antiguo para todos los bolsillos en Sevilla – ABC de Sevilla

Un año más, y ya van cuarenta y seis, la Feria del Libro Antiguo y de Ocasión de Sevilla ha abierto sus puertas en la Plaza Nueva con el espíritu de la añorada Rebecca Buffuna revoloteando por las veinticuatro casetas, como bien recuerda el cartel de la presente edición en homenaje a esta librera norteamericana fallecida el año pasado. Hasta el 9 de diciembre el público podrá encontrar desde valiosas primeras ediciones y facsímiles hasta folletos, revistas, fotografías y libros de bolsillo y de ocasión, estos últimos con precios muy asequibles para todos los bolsillos.
Aparte de la presencia sevillana, han venido libreros de Barcelona, Madrid, Valencia, Granada, Málaga y Cádiz. De la capital malagueña debuta este año la librería Isla Negra. Entre sus fondos destacan facsímiles de gran calidad, como uno del célebre Beato de Liébana del siglo XII. Un dependiente, Javier, comenta que se trata de un ejemplar «hecho con materiales antiguos, pero con las técnicas de ahora». Asimismo, asegura que «nosotros funcionamos mucho por clientela y entre los libros que tenemos vendemos destacados post-incunables». Igualmente dice que el precio de los facsímiles oscila entre los 800 y los 3.000 euros.
La madrileña librería García Prieto es ya una clásica en la Feria del Libro Antiguo de Sevilla, ya que no ha faltado en las últimas trece o catorce ediciones. José Javier García Prieto comenta a ABC que en esta edición ha traído a Sevilla la biblioteca completa de un masón. Por eso entre los anaqueles se exponen libros de autores del exilio, de temas de América y de historia y literatura. La biblioteca es de mediados del siglo XX y se pueden encontrar volúmenes de política de que van desde los años veinte hasta el exilio. Uno de los libros más destacados que se muestran en sus expositores es ‘Definiciones de la Orden y Cavalleria de Alcantara con la historia y origen della’, publicado en 1662. Este librero añade que tiene volúmenes interesantes de poetas del 27, como unas primeras ediciones que Manuel Altolaguirre editó en México, como ‘La hija de Dios. La niña guerrillera’ (1945), de José Bergamín. Igualmente muestra «folletos de republicanos que son inencontrables y que tienen un gran valor», asegura.
También de Madrid viene la librería Ortiz Marcos, que está en la capital hispalense por tercer año. Entre sus tesoros, una primera edición de ‘El hilo mudo’ (1911), de Ramón Gómez de la Serna, en una edición que financió el padre del escritor y que se puede adquirir por 500 euros. Además, tiene una primera edición de ‘Poesías’ (1907), de Unamuno , a 350 euros o un ejemplar dedicado por Ricardo Baroja de su libro ‘El pedigree’ (1923).
Más petición de apoyos
Por su parte, el director de la Feria del Libro Antiguo y de Ocasión de Sevilla, José Manuel Quesada, recalca que «el principal problema que estamos teniendo desde hace tres años es que la Feria del Libro nuevo está muy pegada en fechas a la nuestra y hay mucho público que confunde ambas porque acaba una y luego comienza la otra casi seguida una semana y media después». De ahí que el dueño de la librería Alejandría reclame al Ayuntamiento «que haya más distancia entre ambas ferias», además de reivindicar que «la Feria del Libro Antiguo es la que tradicionalmente se ha celebrado en otoño en Sevilla». También pide al Consistorio —principal patrocinador con 25.000 euros— una mayor aportación económica «para que podamos crecer en próximos años, sobre todo para organizar más actividades culturales». En ese sentido, sería esencial que los libreros contaran con una carpa para albergar presentaciones, cuentacuentos, etc. El alcalde de Sevilla, José Luis Sanz, ha visitado la feria este lunes acompañada de la delegada de Cultura, Minerva Salas, y probablemente se haya hecho eco de las necesidades de los libreros para que la edición de 2024 mejore. Aun así, el director de la Feria del Libro Antiguo agradece el apoyo logístico recibido por el director de eventos literarios del Ayuntamiento hispalense, Jaime Maciá.
Aparte de esa aportación económica, destacan 6.000 euros de la Diputación de Sevilla y el patrocinio que desde hace unos años hace el portal web Todocolección. «Nos gustaría también que la Consejería de Cultura se implicara más porque hace años que no nos dan nada», concluye José Manuel Quesada.